1105 - Mi momento y tu deshora
En la frontera de tu beso implora
mi propio beso, sin portal ni puente;
sentada junto a mí, tan adyacente,
que escucho tu mirada, aunque me ignora.
Es tal vez mi momento y tu deshora,
cuando tu alma recela lo que siente;
emerge diáfano tu subconsciente,
que yo vislumbro y tu razón demora.
Si tendiera mi mano, ¿la asirías?
Si mi palabra, ¿la responderías?
Si mi beso, ¿abriríasle la puerta?
Los tres en sucesión hacia ti avanzan;
dentro de ti en lenguas de fuego danzan
ángeles sonriendo por la oferta.
Los Angeles, 17 de julio de 2004