1157 - No estoy de paso
He caminado en ti la noche entera,
peregrino de rutas escondidas,
transeúnte de plazas y avenidas,
sin hallar cerradura ni barrera.
Esta es mi tierra ya; si no tuviera
más camino que el tuyo o más guaridas
para mis fieras, sobre ti dormidas,
no urgiría otro mundo, otra manera.
Se despereza el alba, y se despiertan
las ventanas sin luz, pero no aciertan
los rostros en sus marcos a incitarme.
El zurrón del recuerdo abandonado,
arrojado a las llamas el cayado,
no estoy de paso ya: Vine a quedarme.
Los Angeles, 14 de octubre de 2004