1162 - Sólo un vaivén
Tú, la idea que ya había olvidado,
la imagen que la niebla me robara,
la canción que la noche silenciara,
el susurro que el viento ha disipado.
Llegaste un día, en el acantilado
el mismo estruendo, en la mañana clara
la misma luz, e idéntica algazara
de rumores cruzando el arbolado.
Pero el mundo contigo no era el mismo:
mezcla de languidez y de erotismo,
mestizaje de imágenes e ideas…
Y al partir, siguió siendo diferente,
otra luz, otra voz…, y en el presente
eres sólo el vaivén de las mareas.
Los Angeles, 27 de octubre de 2004