1280 - Desde fuera de mí
Complaciente cabalgo sobre el lomo
cómodo y teatral de la sonrisa,
que si no nace al fondo, se improvisa
como por obra mágica de un gnomo.
Abiertas las ventanas, hoy me asomo
dentro de mí, como hombre que precisa
mirarse desde fuera. No se pisa,
si dentro se anda, con el mismo aplomo.
Desde fuera me oteo imparcialmente
con la fría consulta de la mente,
ajena a voces de favoritismo.
Descuido cuanto dicen, cuanto creo,
y al mirar desde fuera de mí, veo
sólo aquello que me hace ser yo mismo.
Cantabria, 11 de mayo de 2005