2237 - Comunicación
Sabes mucho de mí, mas tanto ignoras
que tu ánfora persiste medio llena;
si fuente soy que el agua no refrena,
¿por qué al caudal ya en ti no la incorporas?
En formas mil y en incesantes horas
broto y me doy, frenética o serena,
surtidor u hontanar, suave en la arena,
retozona entre rocas obstructoras.
Ni aminoro el fluir ni lo empantano;
como soy me deslizo, está en tu mano
ya hacer acopio o sumergirte entera.
Las palabras no alivian al sediento;
sólo los hechos, el comportamiento,
tienen voz axiomática, sincera.
Los Angeles, 24 de octubre de 2009