Poemas de amor, de soledad, de esperanza
de
Francisco Álvarez Hidalgo

Antología de Sonetos

2268 - Tus manos
Tan gráciles tus manos, y atrevidas, como lo fuera, a no dudar, la rosa si no luciera espinas, tan juiciosa tras defensas en punta inadvertidas. Precipitadas, por desprotegidas, toman la iniciativa; oh, deliciosa acometividad, ni pudorosa ni desenvuelta, manos consentidas. Serpea en mis parcelas y progresa hacia el atrevimiento, que se expresa más deliciosamente que el pudor. Dirígelas, incítalas, provócalas, y en firme y larga suavidad, colócalas en torno a mi… ¿Dónde estarán mejor?
Los Angeles, 22 de noviembre de 2009
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