2425 - Heridas de hoy
Cubierto voy de sangre y cicatrices,
éstas de ayer, en el presente aquélla.
Me acostumbré a pensar que sólo hay huella
de lo que sucedió; que las raíces
del duelo actual serán fuerzas motrices
en gestación perenne, que no sella
el tiempo en su rodar, luz que destella
en memoria de tiempos más felices.
Creí, y a veces creo todavía,
que las heridas de hoy no son de un día,
que nunca cierran, siempre sangrarán.
Mas tantas veces dije ayer lo mismo,
que opino, por el mismo silogismo,
que mañana las de hoy se cerrarán.
Los Angeles, 28 de julio de 2010