2566 - Sueños
Sueños llevo en el núcleo de la mente
que se amotinan exigiendo vida;
no soportan quedarse en tal guarida,
su grito cada vez más exigente.
Saben que hay un festín, que es suficiente
tener hambre, y buscarse la salida,
que el hambriento a sí mismo se convida,
esté o no esté el anfitrión presente.
Mis estériles sueños, ya feraces
por su adquirida libertad, audaces
cruzan los aires en excelso vuelo.
Y soy mejor porque ellos han partido.
No me han dejado, no; sólo han cumplido
su misión de elevarse por mi cielo.
Los Angeles, 14 de febrero de 2011