2575 - Mis palabras
Desbordo mis palabras en su oído,
catarata en azul, ráfaga en verde,
brasa en rojo, y cada una se me pierde
como si carecieran de sentido.
Tal vez la indiferencia, o el olvido,
bestia incorpórea que mis versos muerde,
le impiden escuchar o que recuerde
mi voz escrita, canto sin sonido.
¿Estaré revistiendo mi lenguaje
de extraños símbolos, trivial mensaje,
o sequedad de páramo, sin vida?
No creo. Es una luz que se me enciende,
agua, fuego, cristal… Quien no lo entiende
lleva a cuestas un alma entumecida.
Los Angeles, 24 de febrero de 2011