2580 - Clandestino amor
Brindo por ti, y en el cristal se aloja
mudo temblor que a descifrar no acierto;
te he dejado mi vida al descubierto,
y transito entre el gozo y la congoja.
Libro soy frente a ti, que hoja por hoja
me ha desnudado el alma; recubierto
de tus ojos, no más. Si estoy despierto,
no permitas que el sueño me recoja.
Alzo por ti mi copa; has irrumpido,
con la fascinación de lo prohibido,
por las íntimas sendas de mi vida.
Qué gozo, y a la vez, qué desventura,
dueño de tan insólita hermosura
y mantenerla para mí escondida.
Los Angeles, 2 de marzo de 2011