2595 - Visiones de ayer
Lúgubres se me encienden las visiones
del derrotado ayer, y las apago.
Aún con rostro de arcángeles, no indago
ni su abolengo ni sus intenciones.
Vuelva la primavera a los balcones,
redímase el almendro del estrago
de la estación glacial; yo me deshago
de cuanto ya murió, sin aflicciones.
Siga el reloj su marcha; el calendario
no dilapide el tiempo en inventario
de hojas caídas, ni lo intente el sauce.
Se vive en el presente, ya maduro,
con la vista, muy corta, en el futuro;
las aguas muertas séquense en el cauce.
Los Angeles, 16 de marzo de 2011