2614 - Pequeñeces
Alcancé a conocer cada pavesa
fugitiva del fuego, cada espina
solapada en la rosa, o golondrina
que al fin del éxodo invernal regresa.
Curioseo el jardín, y me confiesa
cada una sus secretos. Me fascina
su afán revelador, y la genuina,
sosegada honradez con que se expresa.
Será porque me han visto en mi retiro
día tras día, cuando absorto miro
pequeñeces, sentado a la ventana.
Me aprecian como amigo, compartiendo
su primor, enemigo del estruendo,
que sobre mi silencio se desgrana.
Los Angeles, 7 de abril de 2011