2772 - Caracola (I)
Tiene el mar, entre rocas, caracolas
que un tiempo fueron ávidos deseos,
ya surgiendo del fondo en burbujeos
o cabalgando a lomo de las olas.
Sonaban a lo lejos barcarolas,
en los bares del puerto, entre rasgueos
de guitarras, fugaces aleteos
de gaviotas, flotar de banderolas.
Tú, descalza, y al aire la melena,
en caricia ambos pies de agua y arena,
y en no sé qué misterios abstraída,
caminabas la tarde, rastreando
tal vez ese deseo azul y blando
que no supo atrapar tu alma dormida.
Los Angeles, 29 de octubre de 2011