3029 - Huecos de la mente
Quiero habitar los huecos que aún no he visto,
ni tal vez presentido, en tu cabeza;
los que nunca traspasan la corteza
al borde de la cual pienso y existo.
Y aun teniendo inquilinos, no desisto
de ocupar algún día cada pieza.
¿No es en total apropiación que empieza
el misterio de amor en que persisto?
Quien detenta las fuerzas de la mente
se apodera del alma en contundente
confiscación, mientras que si hay regiones
que no nos pertenecen, u oquedades,
¿qué intimidad, qué tipo de verdades
sostendrán nuestra fe, nuestras visiones?
Los Angeles, 20 de junio de 2012