3109 - Naturaleza
La alondra, el ciervo, el vendaval, el río
invitan al asombro del viaje;
cada paso, flamante aprendizaje,
cada rumor, sedoso escalofrío.
Seguir sus rutas en el bosque umbrío,
o a campo abierto, al sol, al cortinaje
de pardas nubes sobre gris paisaje,
o al arrebol radiante del estío.
Perderse en gozo por sus mil senderos,
cada avance un misterio, compañeros
de la luz, de las aguas, de la rosa.
Llevando mil caricias en las manos,
y ofreciéndonos férvidos hermanos
de cada ser viviente y cada cosa.
Los Angeles, 4 de diciembre de 2012