3268 - Pereza
Siéntate, hermano, siéntate y reposa
de los muchos quehaceres que no has hecho.
Otros tantos te asedian; los sospecho
flotando por tu mente vaporosa.
No tiene agujas tu reloj, rebosa
de tiempo inmóvil, siempre en tu provecho.
Tantos amaneceres al acecho,
y te acoges a noche tenebrosa.
En ley gramatical atributiva,
serías verbo, pero en voz pasiva,
de forma irregular, y en lengua muerta.
Descansa, hermano, de tu no hacer nada;
reclina una vez más sobre la almohada
la cabeza sin brújula y desierta.
Los Angeles, 3 de junio de 2013