3408 - Fornicar
En el río, en el campo, en la chopera,
acogedores todos, tan discretos
que no divulgarán nuestros secretos,
veremos estallar la primavera.
Ven conmigo; no importan, compañera,
tiempo y lugar, pues no estamos sujetos
a normas o principios obsoletos
que estipulan horarios de tijera.
En todo tu esplendor, audaz, desnuda,
frente a mi propia desnudez, anuda
brazos y muslos, firme, en torno a mí.
Mi sexo, erecto, al horadar tu entraña,
revienta en el disparo que acompaña
tu propia convulsión, mi bella hurí.
Los Angeles, 3 de septiembre de 2013