Poemas de amor, de soledad, de esperanza
de
Francisco Álvarez Hidalgo

Antología de Sonetos

3445 - Espiga
En el campo abrí el surco y planté el grano; nunca vi más fecunda sementera. La gleba lo abrazó, la primavera lo despertó a la vida en el secano. Fue elevándose ubérrimo, lozano, acunado en la brisa viajera, y al fin se abrió en espiga tempranera, que se hará, al sazonar, pan castellano. También abrí tu surco, y mi simiente, fecundada por ti, fue el inocente ángel que hoy duerme en paz sobre la cuna. También un día granará y repita idéntica labor, mientras visita plantío similar, bajo la luna.
Los Angeles, 19 de septiembre de 2013
Libro de visitas