3493 - Descanso
Descansar sin dormir. Tal es mi empeño.
De cada instante, aunque fugaz, consciente.
Sin que el marchito ayer ni lo inminente
desordenen la paz de que soy dueño.
Yacer, mientras absorto desempeño
los quehaceres profundos de la mente,
que no se desarrollan de repente,
mas exigen metódico diseño.
Me importunan la noche y la fatiga,
cada una de las dos firme enemiga
del austero proceso de pensar.
Mas impongo mi ley, razón despierta,
sentido, si en reposo, siempre alerta,
cada uno con su forma de vibrar.
Los Angeles, 15 de octubre de 2013