953 - Contratos
Un contrato de mármol te firmé,
columnas sólidas en templo griego,
firme a los años, resistente al fuego,
no profanado por extraño pie.
Tu contrato, ilegible, escrito fue
en agua, en humo, en aire, absurdo juego
del que en parte me culpo; no fui ciego,
vi su progreso, y no lo rechacé.
Hoy paso a demoler la arquitectura
del templo que erigí; si hay amargura,
permanezca inhumada entre las ruinas.
Descienda el agua sobre ti en tormenta,
tórnese humo la llama que te alienta,
gima tu aire perdido en las esquinas.
Los Angeles, 1 de diciembre de 2003