962 - Isla (VII)
Ciña el estrecho abrazo mi cintura,
nadie más, sólo tú a mi alrededor;
no quiero otro murmullo, otro color,
sino el que tu contorno me procura.
No es cárcel ni destierro, es envoltura
que se apropia de mí, de mi temblor,
y agrega tu sudor a mi sudor;
en tal dinámica mi fe perdura.
No hay calzada que lleve a tierra firme,
ni bajel incitando a despedirme,
tú eres mi alrededor, mi azul y verde.
Estoy en ti, mi sola expectativa
es la de isla flotante, a la deriva,
que en tu horizonte azul feliz se pierde.
Los Angeles, 6 de diciembre de 2003