Brevería 1193
Cuando me acuesto solo galopan los jinetes
que en el Apocalipsis aniquilan el mundo,
deshaciendo mis sueños, quiméricos juguetes,
dándome un nuevo sueño, tenebroso y profundo.
Temo a la noche, temo sus poderes de olvido,
la orfandad desvalida que a su gruta precede,
su silencio que clama con furor de alarido...
Déjame que despierto en tu abrazo me enrede.
abril de 2004