Brevería 1408
A tus dominios de ventisca y hielo
por no sé qué caminos he llegado;
pude haber ido hacia la luz en vuelo,
o hallar descanso en el verdor del prado;
pero vine hacia ti, y agonizante,
con el frío atrofiándome el sentido,
hoy me siento morir, débil amante
cuyo sueño ya se ha desvanecido.
noviembre de 2005