Brevería 1532
Este deseo que hacia ti me instiga,
impulso arrollador, inevitable,
intenta detenerse, y es probable
que se niegue a impeler, o a que prosiga.
Es su placer más álgido en la espera
que tal vez pueda serlo en la llegada;
masoquista cuya alma enamorada
goza de no gozar lo que pudiera.
septiembre de 2006