Brevería 1548
Si espero, me torturo; si no espero,
¿qué sentido le imparto a la existencia?
¿Me habré constituido prisionero
en mi propio confín de incoherencia?
¿Es júbilo o tristeza la esperanza?
¿Nos engañamos o nos entendemos?
Esperar sin saber lo que se alcanza,
¿no es pretender bogar, pero sin remos?
octubre de 2006