Brevería 1598
Cada noche, de lejos, reconstruyo
a martillo y escoplo tu escultura,
porque entre sombra y soledad te intuyo
con más exactitud, más galanura;
sólo tus propias formas te atribuyo,
teñidas de tu audacia y mi locura;
y una vez concluída, sobre el lecho,
en qué incompleta desnudez te estrecho.
enero de 2007