Brevería 1744
El alba, y el crepúsculo, y la rosa,
y el bosque, el mar, las nubes, y los ríos,
son formas muertas, ámbitos vacíos,
a la mente insensible, nebulosa.
Sólo quien sabe contemplar, percibe
la belleza flotando en el ambiente;
o tal vez al mirar atentamente
cada cual a su modo la concibe.
noviembre de 2007