Brevería 1775
Ven, amor; es invierno y atardece,
débil la luz, desiertos los caminos,
la nieve en los tejados, en los pinos,
y el último rumor se desvanece.
Llégate aún más, así, calor, regazo,
y quietud, que las horas se deslicen
lenta, muy lentamente, y eternicen
esta tarde invernal, en este abrazo.
enero de 2008