Brevería 1990
Me encuentro con la gente y no la miro;
ríos de sombras son las calles; pasan
tal que ruidos, o nubes, que se amasan,
disipándose al fin como un suspiro.
Nada pueden decirme. Su lenguaje
lleva un tono neutral, indiferente;
sólo presto atención a la elocuente
provocación que vibra en tu mensaje.
enero de 2009