Brevería 2056
Murió el poeta, no su poesía.
Esta será inmortal. Si a veces fuera
debilitándose su luz, sería
para nacer en nueva primavera,
para regenerarse en nuevo día,
o reanimar el fuego de la hoguera.
La luz que se escribió será imborrable.
Brille en nosotros. Por nosotros hable.
mayo de 2009