Brevería 2125
Quiero apresar inciertas mariposas,
y el inicial rayo de luz del día,
la fragante sonrisa de las rosas,
el último eco de la sinfonía,
pero más que la opción de tantas cosas,
cada alarido de tu anatomía,
tan falto de control, tan contundente,
como si nada fuera suficiente.
septiembre de 2009