Brevería 2283
Redescubrí mi hogar, abrí la puerta,
y eras tú, y me quedé: Fin de camino.
Tanto vagar en búsqueda de oferta
que siempre mía fue; qué desatino.
Se indaga, se codicia, se rastrea,
en desesperación o en optimismo
lo que el alma, o el cuerpo, fantasea,
y vive al lado, o en cada uno mismo.
junio de 2010