Brevería 2416
La voz cordial del alma no es ajena
a la voz sugerente del sentido;
si una imparte la miel de la colmena,
la otra enciende el fervor de la libido;
doble eslabón de singular cadena
que acopla a lo radiante lo prohibido.
Combíname al hablar ambos lenguajes,
que no se desvirtúen tus mensajes.
febrero de 2011