Brevería 2530
Mueren los días, y los voy pisando
en mi errático andar, hojas marchitas.
Gozaron de color, vida, y visitas
de brisa leve en abandono blando.
No hay desprecio en mi acción, quizá añoranza,
de las cosas perdidas.
Llevamos un caudal de despedidas,
pero la vida avanza.
septiembre de 2011