Brevería 3059
Renazco cada día, y es la aurora
nuevo soplo de Dios que me re-crea.
Y madurando voy hora por hora,
hasta que al fin la luz se tambalea,
y la tumba nocturna me devora.
Enfrento sin temor tal odisea,
porque mañana habré resucitado.
A tan múltiples vidas destinado.
octubre de 2013