Brevería 366
Sirenas de mirada seductora,
senos desnudos, y canción perversa,
tendidas en la arena, hora tras hora,
llaman con intención conspiradora
a quien avanza sobre el agua tersa.
Oh, qué incompleto amor hubiera sido
casi abrasado al borde de las llamas
con ímpetu de amante enardecido,
y ver el vientre desaparecido
como las piernas, bajo las escamas.
marzo de 1999