Brevería 419
Enviaré mis versos a tu encuentro,
y te hallarán desnuda de razones,
sin saber si tus propias emociones
permitirán que yo me instale dentro,
haciendo tuyas mis aspiraciones.
Y al abrirse en tus ojos la lectura,
tu íntimo espacio, que ahora está desierto,
ha de quedar íntegramente abierto
al aire de la armónica aventura
que a ritmo inevitable en tí despierto.
julio de 1999