Sonetos
1764 - Zeus / Júpiter
Recolector de nubes, dios del trueno,
y en el Olimpo, padre y soberano,
a quien Fidias, milagro en cada mano,
dio porte mayestático y sereno.
Fue todo menos dios y menos bueno,
reflejo fiel del corazón humano,
hijo rebelde, sátrapa tirano,
y disoluto en libre desenfreno.
En absurda lección contradictoria,
la Grecia democrática dio gloria
a quien llegó a reinar por la violencia.
Usurpador, brutal y parricida,
árbitro de la muerte y de la vida,
y el temor reforzando la creencia.
Los Angeles, 20 de noviembre de 2007
1765 - Afrodita / Venus
Nació de los castrados genitales
de Urano, sobre el mar; la espuma era
la semilla del dios, y ella una fiera
de tórridos instintos animales.
Algo de amor, y vértigos sexuales,
desnudez y belleza su manera,
se encapricha, seduce y adultera
en el Olimpo y entre los mortales.
Helena de los cielos, otorgada
a marido vulgar, pues su llegada
provocó entre los dioses competencia.
Semen astral bajo su piel fluía,
que en explosión erótica surgía
como testigo de su procedencia.
Los Angeles, 21 de noviembre de 2007
1766 - Atenea / Minerva
Zeus no digería la cultura,
y a punto de explotarle, la cabeza
era yunque de fragua en que la pieza,
a martillo forjada, le tortura.
Prometeo el remedio le asegura,
y a golpe de hacha, músculo y destreza,
abre el cráneo del dios, y con presteza
adulta emerge Atena en armadura.
Diosa del arte y la sabiduría,
y en justa lid, de la estrategia fría,
en Troya y siempre con la tropa helena.
Casta como las luces de la mente,
por su lanza y escudo, combatiente,
como su Partenón, firme y serena.
Los Angeles, 21 de noviembre de 2007
1767 - Ares / Marte
Si Atenea estratega mesurada,
Ares guerrero de la fuerza bruta,
que ni sigue política absoluta,
ni le rige la ley, sino la espada.
No hay válida razón justificada
que le lleve a la guerra; la ejecuta
por el puro placer de quien disfruta
ruina, violencia y sangre derramada.
No importa dónde esté, por qué ni cuándo,
combatirá con uno u otro bando
según su voluntad sople, o el viento.
Hijo de Zeus, no alcanzó respeto
ni de él ni de los dioses, simple objeto
de enemistad y de resentimiento.
Los Angeles, 21 de noviembre de 2007
1768 - Hera / Juno
Zeus pudo elegir mujer o diosa
como íntima, perenne compañera
que sus futuros hijos concibiera,
pero tomó a su hermana por esposa.
Casi tan fiel como lo fue celosa,
y mayestática en sus actos, Hera
más que diosa es mujer que desespera,
persigue a sus rivales, les acosa.
Con el chorro de leche de su pecho
traza la Vía Láctea sobre el techo
del mundo, en arrebato de furor.
Y en Heracles, que otrora amamantara,
y otras proles que Zeus engendrara,
descarga la venganza y el rencor.
Los Angeles, 23 de noviembre de 2007
1769 - Hefesto / Vulcano
Respuesta de Hera al brote de Atenea
fue este engendro, divino, cojo y feo;
botado del Olimpo, halló su empleo
en las fraguas de Lemnos. Martillea
noche y día, fusiona, clavetea,
se dispara vivaz chisporroteo,
y surgen la coraza, y el trofeo,
el trono, el yelmo, que el sudor moldea.
¿Cómo pudo en sus brazos Afrodita
abandonar la suave, la exquisita
perfección de su piel sin darse al vómito?
Ares la rescató de tal bajeza,
y se forjó la unión de la belleza
a la altivez del corazón indómito.
Los Angeles, 23 de noviembre de 2007
1770 - Artemisa / Diana
Era un murmullo el bosque, era la brisa
leve caricia en vuelo que no acaba;
eran besos las flechas en la aljaba
suspendida del hombro de Artemisa.
Virginal cazadora que improvisa
senderos, sobrepuja cada traba,
se cierra al hombre a pasador y aldaba,
y donde nadie ha caminado, pisa.
Quien desnuda la vio, sufrió la suerte
del ciervo, el oso, el jabalí: La muerte
al impacto de su arma arrojadiza.
Quien amarla intentó, logró el rechazo.
Ésta no era la diosa del abrazo,
sino del pulso que se independiza.
Los Angeles, 24 de noviembre de 2007
1771 - Apolo / Febo
Arco y flecha, atributos del guerrero,
reposen, y despierten la armonía,
el orden, la razón, la poesía,
ceda al laurel su músculo el acero.
Pugne el efebo en Delfos más ligero,
más alto, más pujante todavía;
y profiera su ambigua profecía
la pitonisa a jefe o mensajero.
En las fuentes la cítara resuene,
y a su tañido cada musa estrene
el arte que de Apolo ha recibido.
Apolo el de las múltiples facetas,
el amador de ninfas y de atletas,
dios de la luz, sólo de luz vestido.
Los Angeles, 24 de noviembre de 2007
1772 - Hades / Plutón
El oscuro inframundo fue su parte,
oscuro fue su carro, remolcado
por oscuros caballos, y sentado
en trono oscuro la justicia imparte.
Su territorio, sólido baluarte
imposible de huir, sólo poblado
de quienes por la muerte hayan cruzado
el río Estigia, bajo el estandarte
que alto en la barca de Caronte ondea.
Reino sombrío en el que no alborea,
y cada muerto es vagabunda sombra.
Lúgubre dios de vida clandestina,
supo amar y raptar a Proserpina,
‘Reina de hierro’ a la que nadie nombra.
Los Angeles, 24 de noviembre de 2007
1773 - Hermes / Mercurio
De los dioses alado mensajero,
y protector de atletas y ladrones,
granuja cuyas múltiples funciones
hacen de cada golfo su heredero.
No hay arriesgado o cómodo sendero,
ni frontera enclavada entre naciones,
ni transacción, ni falsificaciones,
sin etiqueta de este viajero.
Declamador, intérprete, cuentista,
más diplomático que antagonista,
aportador de sueños a los vivos,
y guía de las almas al averno.
El chaquetero que en cualquier gobierno
cumple un papel sin cuestionar motivos.
Los Angeles, 25 de noviembre de 2007
1774 - Dioniso / Baco
Fluya el vino en raudal; cada Bacante
dance y embriáguese la noche entera,
desnuda entre la fronda, que la fiera
dormida en cada copa es un amante
dispuesto a alborotar, desafiante,
cuerpo y alma hasta la última frontera;
espíritu de Baco, que libera
cuanto el recato reprimió frustrante.
Coronado de pámpanos, Dioniso
logra crear ficticio paraíso
sin fracasos, ni lágrimas, ni heridas,
como si todo aquello que se alcanza
se convirtiera en oro, a semejanza
del infortunio acontecido a Midas.
Los Angeles, 26 de noviembre de 2007
1775 - Urano
Es la noche intervalo enamorado,
y Urano de su bóveda se apea
para extender sobre la madre Gea
su curva fecundante; y a su lado
quedará hasta que el toque delicado
de la mañana indique que alborea.
Hijo y esposo, de esta unión procrea
Cíclopes y Titanes. Qué agregado
de razas, músculo y disparidades,
que al fin destierra a las profundidades
del Tártaro, entre pánico y vergüenza.
Cronos le castra, y surge la figura
de Afrodita, que en toda su hermosura
de la espuma del sexo se destrenza.
Los Angeles, 27 de noviembre de 2007