Breverías
2851
La mayoría de los libros son
repertorio de ideas en neblina,
en torno a cuyo erial se arremolina
carnaval de palabras en acción.
Donde la idea en nimiedad naufraga,
el vocablo navega a toda vela;
y el lector, abatido, se consuela
con el vino que endulza, mas no embriaga.
2852
En el otoño te esperé, cuando era
plácido mi reposo, y en tu mano
danzaba en embriaguez la primavera,
alternando lo ingenuo y lo mundano.
Temías al invierno, y no viniste,
recelosa de ocasos y futuro,
cuando es sólo el presente que persiste,
ni hay fruto más jugoso que el maduro.
2853
¿Satirizas el libro que he adquirido,
y entre mis manos va adquiriendo vida?
¿Me burlaré, tal vez, de ese vestido,
que al parecer te has hecho a la medida?
¿Del amante que induce tu gemido,
a su costado en desnudez tendida?
A cada cual su inclinación, su gusto;
no respetarlo es desleal e injusto.
2854
No tengo una respuesta a los problemas
de este mundo falaz que nos circunda,
mas tengo una canción, y mis poemas
intentan acallar la barahúnda
de sus gritos, su horror, y las extremas
descargas de su histeria furibunda.
El verso es más sutil, más poderoso,
más eficaz también, por silencioso.
2855
Escucha, observa la naturaleza,
sin análisis ciego ni sondeo
que trastocan su paz y su belleza;
hollen tus pies en leve chapoteo
su piel acariciante, su tibieza,
percibe su gentil revoloteo.
¿Qué importa el nombre o el color del ave?
No en ella, en su canción está la clave.
Sonetos
3122 - Sexo
No temas al reptil, o a la pantera,
que serpentea, o brinca, contundente,
al fondo de tu entraña; allí, latente,
fueron sueño ancestral, que hoy se libera.
Cada cual, mal o bien, y a su manera,
lleva una jungla en sí, de componente
psicosomático, que de repente
en plena insurrección se considera.
Son dos, únicamente, tus opciones:
Confrontar las llamadas tentaciones,
o dejarte arrollar por su arrancada.
La seducción no exige, mas sugiere
cuanto ya vibra en ti; sólo requiere
tu plena aceptación, o tu escapada.
Los Angeles, 15 de diciembre de 2012
3123 - Silencio
Tu discreción, si en disyuntiva calla,
¿quién, y cómo será, que la interpreta?
Se te puede asignar una etiqueta
que ofrezca, más que explicación, batalla.
¿Has de callar si el déspota restalla
su látigo opresor, o si se agrieta
la fábrica social, o la espoleta
a punto está de salpicar metralla?
Puede el silencio ser lingote de oro,
puede también ser plomo, en deterioro
de obras de arte, de vidas inocentes.
Reprimir las ideas en los labios
prerrogativa llega a ser de sabios,
y hablar, en ciertos casos, de valientes.
Los Angeles, 16 de diciembre de 2012
3124 - Dormir
Dormir es simulacro de la muerte,
y sin embargo detestamos ésta,
y abrazamos la noche, que se apresta
a matarnos un tiempo. Quien revierte
a la vida normal, tiene la suerte
de la resurrección, está de fiesta;
perdió un tercio de vida, y no protesta;
vuelve tal vez más lúcido, más fuerte.
Nos engañamos a nosotros mismos
fabricándonos vanos silogismos
que exaltan una muerte, y la otra empañan.
Dormir, morir, devastación de vida
fluyendo por idéntica avenida,
sombras que sin cesar nos acompañan.
Los Angeles, 16 de diciembre de 2012
3125 - Políticos
Cicerón y Demóstenes, hoy día,
a sus dioses de mármol o de cera,
rogarían hermética sordera
frente a nuestra moderna algarabía.
La vacuidad de ideas, la anarquía
de gárrulas palabras, la altanera
pose del orador, son cristalera
que a pedradas quebrara mi porfía.
Me avergüenzo de toda esa canalla
que, elegidos o no, no da la talla
de la alta posición que representa.
Cuatreros de capuz y guante blanco,
rasgo mis vestiduras, las arranco,
frente a vuestra alma, y vuestro cuerpo, en venta.
Los Angeles, 16 de diciembre de 2012
3126 - Éxito
Se acercaba a las cosas con la idea
de su conocimiento, su conquista;
artesano, tal vez, tal vez artista,
con ambición de mundo, no de aldea.
Era afán que a sí mismo se espolea,
de personalidad inconformista,
siempre hacia lo ulterior, coleccionista
de triunfos y agasajo a su tarea.
Dependiente de címbalos ajenos,
y jinete de insólitos terrenos,
era su corazón campo baldío.
Ignoraba que el éxito es fracaso
si se insiste en colmar el otro vaso,
dejando el propio en orfandad, vacío.
Los Angeles, 17 de diciembre de 2012
3127 - Talento
Tiene cada persona su talento,
que no se mide en ley de inteligencia,
mas de resolución, de persistencia,
y, en la contrariedad, de afrontamiento.
No es ingenioso, es tarambana el viento
insuflando las velas; la excelencia
corresponde al marino y su experiencia,
dirigiendo la nave en movimiento.
La esencia del talento es la bravura
de hallar norte, trazar la singladura,
y lanzar el espíritu a la brega.
No es el más sabio, en su quehacer brillante,
ni el más ensoñador, ni el más galante,
sino el que más sabe luchar, quien llega.
Los Angeles, 17 de diciembre de 2012
3128 - Tentación
¿Quién, o qué, sigiloso, te seduce,
quedando a punto de aceptar la oferta?
Tactos de seda llaman a la puerta,
y, al entreabrirla, un ángel se introduce.
Pareces conocerlo, reproduce
rasgos ya vislumbrados. Te despierta
sensación trepidante, que no acierta
la mente a descifrar, ni a qué conduce.
El ángel, negro o blanco, aún no lo intuyes,
se muestra convincente, y no rehúyes,
pero tampoco admites, su propuesta.
Y sacudiendo al fin temor y duda,
vas quedándote extática, desnuda,
y tu fragilidad se va de fiesta.
Los Angeles, 17 de diciembre de 2012
3129 - Futuro
Lento va aproximándose el futuro,
o de prisa, tal vez; pero tú, ausente,
no lo contemplarás; se hará presente,
tan frágil, tan fugaz, tan inseguro,
perdiéndose al cruzar el alto muro,
o el túnel espectral, o el viejo puente
que lo arrastra a un pasado en permanente
reclusión y quietud, y en claroscuro.
Podrás, volviendo el rostro, contemplarlo,
mas nunca lograrás modificarlo;
sólo el hoy te permite alteraciones.
El futuro no es tuyo. Harás proyectos
que ni el presente tornará perfectos,
porque son limitadas tus opciones.
Los Angeles, 18 de diciembre de 2012