1257 - Vacilante
Me pesa tanto el tiempo que he vivido…
Tanto tiempo sin ti, tanto deseo,
mirándote con ojos de museo,
valor ajeno, nunca poseído.
Tan inmediato que, si me divido,
la otra parte eres tú; si balbuceo,
se escuchan tus palabras; si flirteo,
sólo a mi piel se adhiere tu sentido.
Umbral tan improbable, tan distante,
que al abordarlo, pierdo, vacilante,
la osadía de entrar. ¿No ves que espero?
¿No entiendes el lenguaje silencioso
de los ojos, del gesto cauteloso,
que se dirige a ti desde el sendero?
Los Angeles, 27 de marzo de 2005