1269 - Ésta es la noche
El ángel turbador de la tristeza
ha plegado sus alas, se ha dormido;
desvelados tú y yo y nuestra libido,
ésta es la noche en que la vida empieza.
El susurro del aire, la belleza
de los cielos desnudos, el aullido
del lobo en la tiniebla, y el crujido
universal de la naturaleza,
son eventualidad imperceptible.
Nosotros somos lo único tangible
en el cosmos; adósate a mi piel.
Mírame y calla, deja que los dedos
elaboren en rítmicos enredos
tacto de plumas y sabor a miel.
Los Angeles, 23 de abril de 2005