1302 - Es la hora
Ha tropezado sobre ti un amante,
cayó de bruces a tus pies, y llora
por ser, en el propósito, demora,
y en el arte de amar, sabio ignorante.
No es ya la edad del caballero andante
y la arcaica princesa, receptora
de dádivas y ritos, es la hora
de la nueva estrategia del instante.
Levántale del suelo, y agresiva
tome tu voluntad la iniciativa,
acaríciele el roce de tu voz.
Desanúdese al punto la atadura
del cíngulo que blinda tu cintura,
y abre de par en par el albornoz.
Los Angeles, 22 de junio de 2005