1315 - Esperándote
Se me enrosca a tu piel el pensamiento,
la sed de ti me abrasa las entrañas
y el hambre las perfora. Cómo arañas
toda mi arquitectura hasta el cimiento.
Y ni en queja prorrumpo, ni en lamento,
que mis tribulaciones, aunque extrañas,
podrán desintegrarse si enmarañas
el flujo de mi aliento con tu aliento.
Un tiempo fui tenaz enredadera
acoplada a tu tronco. Si pudiera
tender de nuevo sobre ti mis brazos…
O si al menos lograra erradicarte
de mis propios recuerdos…, que esperarte
no es más que un modo de morir a plazos.
Los Angeles, 23 de julio de 2005