1356 - Renacimiento
Se me apagan los libros, las canciones,
las doradas manzanas, los viajes,
se me bloquean ya los engranajes
impulsores de ideas y emociones.
No me quedan aliento ni razones
para explicar los ásperos ultrajes
de los años; me arropo en los vendajes
que ocultan mis heridas y aflicciones.
Pero mi amante no me ve en tal modo;
me ve en su juventud, y sobre todo
me contagia su amor y su entusiasmo.
Extinguidas por brisas adversarias,
encenderé las viejas luminarias
sobre una vida de infinito orgasmo.
Los Angeles, 13 de octubre de 2005