1430 - Frisky (I)
Hoy, a los 18 años de edad, mi gato,
ya sordo y ciego, alcanzó su
definitivo sueño
Cayó la sombra sobre tu mirada
como un telón apenas transparente,
y se difuminó tu medio ambiente,
dejándote la vida mutilada.
Siempre más de parterre que de almohada,
seguro de tu espacio, independiente,
envejeciste casi de repente,
tan frágil e impreciso en tu pisada.
Se te apagó la luz, luego el sonido
bajó los párpados, cayó dormido,
y tu andar se hizo círculo cerrado.
Hoy, antes del adiós, contra mi pecho,
te arrullé una vez más, y ahora sospecho
que a mejor realidad has despertado.
Los Angeles, 18 de marzo de 2006