1439 - Manos
Eran caballos al galope alzando
por ruta sideral polvo de estrellas;
eran vivaz enjambre de doncellas
en candorosa desnudez bailando;
era el mar verdiazul desenredando
olas de plata sobre viejas huellas;
era cita en olvido de querellas,
era tacto sensual, gentil, tan blando…
Era la superficie de tus manos
reverdeciendo acordes wagnerianos,
suaves nocturnos, tiernos madrigales.
Tus manos de arquitecto, de tallista,
moldeándome, manos de organista
trepidando mis íntimos cristales.
Los Angeles, 25 de marzo de 2006