1589 - Tocado
Como una rama me rozó la frente,
como una gota humedeció mi cara,
brilló en mis ojos como luna clara,
hirió mi oído como voz urgente.
Hoy he sido tocado. De repente,
todo a mi alrededor es algazara,
invierno en primavera se declara,
la sombra es luz, la oposición consiente.
No sé qué mano cálida, invisible,
¿ángel?, ¿ninfa?, se me ha hecho disponible
por los cinco senderos del sentido,
por las rutas del alma más discretas.
En mi muralla se han abierto grietas,
y soy, a través de ellas, invadido.
Los Angeles, 11 de noviembre de 2006