1617 - Miliciano universal
En la cima del odio los he visto,
torva mirada, mente diminuta,
asignando la cruz o la cicuta
a nuevo Sócrates, a nuevo Cristo.
Superfluo cada cual si desprovisto
de la pistola al cinto, que permuta
justicia y orden por la fuerza bruta,
a la que inexorable me resisto.
Yugo perturbador nos avasalla
a fuerza de ignorancia y de metralla,
cuando el puño tremola única idea.
Los he visto, ignorantes milicianos
acunando a la muerte entre las manos,
en convicción de dinamita y tea.
Los Angeles, 17 de enero de 2007