1661 - Todos culpables
Rompiéramos las leyes mal escritas,
armáramos revueltas mal pensadas,
calláramos al público en las gradas,
derrocáramos púrpuras malditas.
Mientras en tu apatía te ejercitas,
lúcidas mentes quedan marginadas,
manos activas marchan esposadas,
y sólo tibia disensión vomitas.
Por carriles de sangre el mundo avanza,
yunta servil, fatídica alianza
de silencio, consorcio y metralleta.
Culpables quien elude o atenúa,
tanto como el que, péndulo, fluctúa,
y quien se justifica y lo interpreta.
Los Angeles, 22 de marzo de 2007