1756 - Penetración
Te penetro hasta el fondo de la mente,
donde acallas preguntas sin respuesta;
pero en ti surge un reventón de fiesta
como intuyendo todo de repente.
¿Tan clara es mi irrupción, tan convincente,
que una luz inmediata contrarresta
cada hilacha de sombra, y manifiesta
cuanto haya camuflado el subconsciente?
También penetro al fondo de tu entraña,
desgarrando la inmensa telaraña
que tejieran descuidos y orfandades.
Y al penetrar mis ojos tu mirada,
mi triple infiltración es llamarada
desanudando fieras tempestades.
Los Angeles, 5 de octubre de 2007